La LLuvia ya no es Potable en la Tierra
Estos compuestos químicos se encuentran en numerosos productos de consumo, incluidos revestimientos para revestimientos de papel, revestimientos de textiles, revestimientos de cocinas, espumas de protección, cosméticos, detergentes y repelentes de agua, espumas de protección, disolventes y espumas de protección contra incendios.
Los PFAS son extremadamente tóxicos, algo que probablemente se deba a que son extremadamente resistentes a la oxidación y las condiciones del medio ambiente y, por lo tanto, permanecen en la naturaleza durante mucho tiempo. Estas sustancias son conocidas por los nombres de marcas como Teflon de DuPont, Gore-Tex de W.L. Gore & Associates, Scott, Silverstone, Stainmaster y EZ-Off. El problema es que mientras esos nombres son reconocibles, los PFAS en sí mismos son invisibles y casi imposibles de eliminar.
De hecho, las PFAS son un problema planetario, ya que todos los continentes están contaminados con ellas. Las sustancias están en el agua, la tierra y el aire y se han detectado en la sangre de humanos y animales de todas partes del mundo. Internet está lleno de historias de personas que han vivido cerca de fábricas que producen PFAS y han experimentado efectos adversos en la salud, incluyendo cáncer, obesidad, infertilidad, baja inteligencia, defectos de nacimiento, pérdida de cabello, enfermedades del hígado y estómago, enfermedades del sistema inmunológico, enfermedades del sistema nervioso, enfermedades del sistema reproductivo, enfermedades de los huesos y articulaciones y enfermedades de los ojos. Sin embargo, las PFAS son solo una parte del problema.
Junto con las PFAS, hay otros compuestos químicos que contribuyen a la contaminación global del agua. Estos incluyen el diclorometano, el tetracloruro de carbono, el hidrocarburo aromático policíclico, el plomo y el mercurio. Todos estos compuestos químicos son altamente tóxicos y, por lo tanto, potencialmente mortales. Por supuesto, la contaminación del agua no es un problema nuevo, sino que viene de hace mucho tiempo. La contaminación del agua es un problema que se remonta a la revolución industrial. La industrialización ha producido una enorme cantidad de residuos y desechos tóxicos que se han acumulado en el agua y en el suelo. Y aunque el problema es evidente, parece que no podemos hacer nada para solucionarlo.
Sin embargo, todavía podemos hacer algo al respecto. Al igual que con la contaminación del aire, la contaminación del agua es un problema que podemos abordar directamente. Podemos reducir la cantidad de desechos y residuos tóxicos que producimos y podemos mejorar la forma en que gestionamos los residuos y desechos que producimos. Y podemos mejorar la calidad del agua que consumimos. Si tomamos estas medidas, podemos reducir la cantidad de contaminantes en el agua y mejorar significativamente nuestra salud y el medio ambiente.